Guía
Cuando ya tenemos claro qué tipo de bombilla necesitamos, otro punto importante a tener en cuenta es que la temperatura de la luz sea la adecuada para el uso que le vamos a dar a la bombilla. La temperatura se indica en grados Kelvin (K) y dependiendo del tono de luz que busques, necesitarás luces más cálidas o más frías.
De una forma rápida, los tonos cálidos dan una luz más suave y son adecuados para salones o habitaciones, mientras que los tonos más fríos dan una luz blanca intensa y están indicados para garajes o lugares de trabajo que necesiten mucha iluminación. En la siguiente tabla puedes ver la escala de temperatura en función de los grados Kelvin de la bombilla.
TIPOS DE BOMBILLAS
Bombillas incandescentes. Baja eficiencia energética. La luz se genera tras calentar el filamento, por lo que alcanzan mucha temperatura, y parte de la energía se desaprovecha en calor (no en luz). Nada más encenderse ya aportan toda la luz que pueden proporcionar, es una luz de tonos cálidos por su elevada temperatura. Su vida útil es muy corta.
Bombillas halógenas. Se trata de pequeños focos de mucha potencia. Tienen un rendimiento ligeramente mejor que el de las bombillas incandescentes al igual que su vida útil. Son bombillas que desde el encendido ya aportan toda la luz posible, iluminando de manera inmediata. Producen una luz ligeramente amarillenta.
Tubos fluorescentes. Son bastante más eficientes que las bombillas tradicionales, debido a su composición de gases y sales. Consumen hasta un 80% menos que una bombilla incandescente, aportando la misma cantidad de luz. La vida útil de un tubo puede variar según del tipo que sea y donde esté montado, normalmente dura entre 6 y 20 veces más que las lámparas incandescentes. Desde el encendido pueden tardar algo en dar su máxima potencia de luz. No se recomienda poner este tipo de lámparas en lugares donde se encienda y se apague continuamente la luz, porque se puede acortar su vida útil y además no responden con la rapidez necesaria. En cuanto al tono de luz, en el mercado puedes encontrar tanto tubos de luz cálida como luz fría.
Tubos Led. Son el mismo concepto que las bombillas LED pero en formato tubo. Están pensados para mejorar el rendimiento energético y la eficiencia en los sitios dónde estaban instalados los tubos fluorescentes.
¿Qué tener en cuenta para comprar bombillas online?
La potencia (W). La potencia en vatios (W) indica realmente lo que consume de energía cada bombilla. A más W más consumo energético, pero ¡ojo! que no significa que una bombilla con muchos W ilumine más, la cantidad de luz viene dada por los lúmenes.
El factor de potencia (PF). Es lo que menos analizamos cuando compramos una bombilla y tal vez sea lo más importante. El FP hace referencia a la eficiencia energética de cada bombilla. Es decir, de todos los W que consume de energía, cuantos se aprovechan para transformarla en luz o lúmenes. Se mide en una escala de 0 a 1 y significa el % de energía aprovechada para convertir en luz. Si compras una bombilla con un 0.7, será una bombilla eficiente, el 70% de la energía consumida (W) la convierte en luz, sólo un 30% se materializa en pérdida energética.
El flujo luminoso o lúmenes (Lm). La potencia de una bombilla en lúmenes (Lm) nos indica qué cantidad de luz emite una bombilla. Las bombillas LED consumen menos vatios para emitir más lúmenes, lo que supone un gran ahorro de energía.
El ángulo de luz (Nº). Tener en cuenta el ángulo de luz implica decidir sobre el tipo de luz que quieres en cada situación. Es una cuestión decorativa y práctica según te interese una luz focal o ambiental.
- Ángulo inferior a 40º conseguirá un efecto “foco”, se iluminará un espacio reducido de un ambiente y de manera más directa.
- Ángulo de 120º o más, la luz se dispersa e ilumina todo un ambiente.
La temperatura (ºK). La temperatura de la luz viene dada por los grados Kelvin (K) de cada bombilla. Según los grados K podemos tener un tono de luz más cálido o más frío. Fíjate en este parámetro según te interese poner luces cálidas o más frías.
- Blanco cálido: 3000K Luz más tenue y de ambiente, ideal para salones o habitaciones.
- Blanco puro: 4500K Te aportarán una intensidad media, lo más parecido a la luz natural, apta para cocinas, baños y zonas de trabajo.
- Blanco frío: 5800K Será una luz blanca e intensa, indicada para trasteros, garajes o lugares que necesiten una gran fuente de luz.
El índice cromático (CRI o Ra). Indica la calidad de la luz emitida por una bombilla y su fiabilidad en relación a la luz natural. Se indica en una escala de 0 a 100, donde 100 es la luz y el color natural. Por tanto, si compras una bombilla con un CRI de 90 sobre 100, te asegurarás de que la luz sea lo más parecida a la luz natural y por tanto será una luz de gran calidad. Si quieres comprobar esta información en un producto, ten en cuenta que no todos los fabricantes la proporcionan de la misma forma. Normalmente aparece un código numérico como por ejemplo 827. En este caso, el 8 hace referencia al CRI (80), y los dos últimos números hacen referencia a la temperatura, serían 2700ºK en este ejemplo.
El casquillo o base. Lo dejamos para el final pero es lo más básico, ya que antes de comprar bombillas online, debemos asegurarnos de que los casquillos encajan. Si tienes dudas de los tipos de casquillo que existen, estos son los más comunes:
- Casquillo E27: más conocido como “el gordo”, es el más habitual y lo puedes encontrar en la mayoría de lámparas.
- Casquillo E14: también conocido como “el delgado”. Se utiliza en apliques, lámparas de araña y bombillas vela.
- Casquillo GU10: se utiliza en focos sin transformador y se instala con clemas, normalmente en focos empotrables y rieles.
- Casquillo GU5.3: se utiliza en focos con transformador, se instala también con clemas y a presión. Su uso es muy habitual en focos empotrados.
- Casquillo R7S: utilizado en lámparas de pie y proyectores de exterior.
- Casquillo G9: utilizado para lámparas de colgar, apliques y plafones.
- Casquillo G4: otro modelo utilizado para iluminarias integradas al techo o pared, tal como apliques, plafones o lámparas de colgar.
- Casquillo G24: se utiliza en iluminarias empotradas o downlight.
Además de esta variedad, a veces aunque no tengas el tipo de casquillo que necesitas, existen muchos adaptadores de casquillo de bombillas que permiten por ejemplo cambiar un casquillo E27 a un E14 y viceversa, o adaptadores para pasar de un E27 a un GU10.